Este artículo sirve de apoyo al experimento: En el que durante 4 meses trabajaremos en los 4 cuadrantes del ser humano: físico, emocional, intelectual y espiritual. Uno cada cuatro semanas.
Siendo el último el cuadrante espiritual.
1. Motivos para potenciar tu dimensión espiritual
El cuadrante espiritual es el más profundo de todos. En él está nuestra esencia más pura, sin embargo, a menudo lo tenemos totalmente abandonado e ignorado. Esto hace que al igual que ocurre con el cuadrante emocional vamos por la vida rotos y sin brújula.
En Potencial Disruptivo ponemos especial énfasis en vivir una vida con sentido, para lo que es fundamental contar con ciertas motivaciones vitales, tal y como indica Victor Frankl, y muchas de estas motivaciones puedes encontrarlas indagando en tu cuadrante espiritual.
Desde descubrir cuáles son tus principales valores, a aprender a separar tu ego de tu esencia.
No obstante, dar los primeros pasos en el cuadrante espiritual no es tarea sencilla, por lo general nadie nos lleva de la mano como sí sucede con nuestra parte racional o física. Así que toca investigar, probar, fallar y volver a empezar.
Aquí te dejo 3 motivos para hacerlo:
- Quitarte capas de ego que han dejado de serte útiles para poco a poco redescubrir tu propia esencia.
- Indagar en ti mismo para conocerte más y mejor de manera que puedas sacar de tu vida todo aquello que te pesa y no te aporta verdadero valor.
- Descubrir, y por lo tanto, dedicar más tiempo a todo aquello que te apasiona de forma innata creando un estilo de vida que te llene.
Nunca es tarde para profundizar en uno mismo.
2. #5 hábitos para potenciar tu cuadrante espiritual
Lo que cualquier persona desea en lo más profundo es sentirse a gusto consigo misma y disfrutar de su día a día. El problema es que a menudo nos desviamos de este camino debido a la gran cantidad de distracciones con las que nos topamos en el día a día.
Esto hace que nos separemos de nosotros mismos a la par que nos acercamos a modas pasajeras, peticiones de gente cercana, planes que no nos llenan, etc.
Para conseguir una mayor conexión contigo mismo y no desviarte de lo que verdaderamente te importa puedes probar con estos 5 hábitos.
2.1. #1 Escucha el silencio
¿Eres de esas personas que no pueden estar solas en silencio?
Eres de esas personas que:
- Llegan a casa y encienden la tele aunque no le presten atención.
- Llegan a casa y encienden la radio aunque no le presten atención.
- Vas con música a todas partes.
- No puedes ir en el coche con la radio apagada.
- No puedes salir a correr o pasear sin auriculares.
¿Eres de estas personas?
Tranquilo, no eres el único.
Y tampoco quiere decir que sea malo escuchar música o un podcast mientras sales a correr.
Simplemente te invito a que tomes consciencia sobre si eres de esas personas que no soportan estar en silencio consigo mismas y siempre tienen que tener algún tipo de ruido de fondo. Si descubres que es así, puedes indagar en el asunto y proponente ciertos tiempos en silencio contigo mismo para empezar a escucharte.
2.2. #2 Abúrrete más a menudo
Se empieza a hablar del problema de estar siempre entretenidos con trivialidades.
El programa de turno, las redes sociales, netflix, y la lista sigue.
Esto hace que nuestra creatividad se atrofie a pasos agigantados, ya no estamos aburridos ni en la taza del váter.
Sin embargo, esto no solo supone un problema para nuestra creatividad, también lo supone para nuestra espiritualidad. Dejamos de hacernos preguntas existenciales, dejamos de filosofar con nosotros mismos y con los demás.
Tan solo hay lugar para el entretenimiento.
Cambia esto y comienza a limitar el tiempo que dedicas a videojuegos, redes sociales, y netflix.
2.3. #3 Lee sobre espiritualidad
Como decía al inicio, a menudo el camino hacia potenciar nuestro cuadrante espiritual se hace cuesta arriba ya que lo andamos solos.
Esto puede quedar en parte subsanado al contar con materiales sobre la materia. Libros o incluso documentales te ayudarán a profundizar en tu propia esencia de la mano de grandes maestros por muy poco o nada de dinero.
2.4. #4 Conoce tus valores personales
No nos mueve lo mismo a todas las personas.
Los valores personales son eso mismo: personales.
Así que un buen ejercicio es el de conocer tus 3 o 5 valores principales para así tener una ayuda a la hora de tomar decisiones importantes.
2.5. #5 Vigila tu ego
Saber diferenciar cuando estás actuando desde tu ego y cuando lo estás haciendo desde tu esencia es fundamental para empezar a comprender tu funcionamiento y reducir tu sufrimiento.
El ego son capas protectoras que tú y tu entorno habéis puesto sobre ti, pero que llegado cierto momento lejos de ayudarte, te pesan y te alejan de vivir tu día a día con plenitud.
—
Esto es todo por el post de hoy, ahora te toca a ti pasar a la acción y potenciar tu cuadrante espiritual como nunca antes.